17 de abril de 2009

Pola

Después de esta dedicatoria, no podía no-leer el libro sensación de la temporada.

Las teorías salvajes es una novela rara, confusa, llena de información, donde sus líneas narrativas se entrecruzan todo el tiempo, se insertan textos de estilo científico al lado de narradores en primera persona luego se salta a narradores en tercera, se narran al mismo tiempo varias historias que no parecen dirigirse del todo hacia el mismo lugar, una novela caprichosa.
Aún a pesar de esta fuga constante de la línea narrativa, del orden lógico esperable de un reencuentro de todo lo dicho en un punto, la novela también se presenta como una pelota de información condensada que se clava en el estómago del lector como si hubiera sido arrojada con toda la furia de un puntinazo violento con intención de liquidar al arquero.
Es coqueta, sexy, divertida y nerd porque estira el lenguaje y lo convierte en un chicle que a veces está más elástico y nuevito y en otras oportunidades parece más duro y viejo, dificil de roer, dificil de digerir.
Se ha dicho que la novela es una Novela Google, quizás por este azar de las palabras puestas en un cuadro blanco y las opciones entrecruzadas que se obtienen (“Voy a Tener Suerte” una declaración que navega en el optimismo ingenuo que es casi la marca user friendly de Google) al apretar un botón. Sin embargo debería quizás hablarse de Novela Wikipedia que es el buscador que todo nerd legítimo sabe utilizar. “Si lo dice Wikipedia tiene que ser cierto” declara un grupo de Facebook y es precisamente lo que sienten los millones de usuarios que confían ciegamente en la enciclopedia gratuita como fuente de sus informaciones nerd. Porque Wikipedia es la corporización del espíritu cooperativista, desinteresado y de compartimiento de conocimiento que está en la base del pensamiento nerd. No por nada las entradas sobre personajes de cómic y teorías de la física (dos necesidades clave en la vida de un nerd) son las más elaboradas y exhaustivas.
Eso es Las teorías salvajes también: una enmarañada red de ideas que se exponen e interpelan al lector, lo desafían a los dos clicks para entrar el nombre de la teoría en el cuadro blanco de búsqueda de Wikipedia incorporado al Mozilla Firefox y después, casi como una palmada al hombro lo desaniman: “no hacía falta, era un chiste.”
Porque cuando se logra superar esa densidad semántica plagada de teoría y se ve a un personaje buscando una frase perfecta, con sentido, inteligente y sagaz para decirse a él mismo ante la escena de una felación con un travesti, entonces se entiende el ridículo de la situación y eso sucede en varios momentos, con una metarreflexión acerca de la estudiantina tipo “venganza de los nerds” incluida.
El brillante desenlace de la historia de una de las protagonistas con apellido difícil de pronunciar, está lleno de poesía y bits, una asociación deliciosa que hace que la tercera y última parte de la novela adquiera cierta estrutura narrativa apenas más convencional y lineal.
Por lo demás, todo lo que esta novela declara tener esta: pasillos de Puan, profesores excéntricos, teorías disparatadas, pasos de comedia y un cierto sabor orillero a Los detectives salvajes, claro. Sólo que mientras la novela de Bolaño hacía una especie de historia oral en clave de comedia acerca de los grupúsculos de poesía, Las teorías salvajes lleva al ridículo del paso de comedia a toda esta generación de geeks, nerds, snobs y chicas alternativas de Filosofía y Letras que están ahí y adquieren diversos grados de visibilidad y neurosis.
Rellena con ilustraciones y tachaduras, esbozos, notas al pie, la novela también gana el grado de collage experimental típico del diario de una de estas chicas neuróticas de filo y no se priva de insertar un divertido diario de una ex guerrillera dedicado a Mao a quien para mantener en clave menciona como Moo o de insertar también la construcción de un videojuego que es el reverso perfecto del que programa Felipe Félix, el hacker de Las Islas de Carlos Gamerro: mientras que este videojuego sobre Malvinas era una reescritura de la guerra para que ganara el bando argentino, en el videojuego guerrillero de Las teorías salvajes lo que hay es un regodeo en los valores hipócritas de la clase media acomodada que siempre se acomoda precisamente, según para donde sople el viento político imperante.
Así, de a trozos groseros y apenas delimitados, se construye Las teorías salvajes como un cuerpo textual que también permite reflexionar sobre el género novela como lo que es: un condensado de partes de discursos menores atados con alambre para dar un discurso primario.
Las teorías salvajes es por esto entonces, un Franksentein narrativo pero en versión femenina, cool, y muy bonita.

14 comentarios:

Anónimo dijo...

cada vez que leo una crítica de esta novela, no entiendo nada.

Drodro dijo...

O sea que sigue en la Academia Coca Cola?

ShopGirl dijo...

Se tendra en cuenta para leer algun dia en un balcon sin lluvia.

Saludos!

Doctor Hilarius dijo...

Estimado Rufián,
Le envidiamos la dedicatoria que ha recibido.

Settembrini dijo...

Suena a que es una parodia a Beatriz Sarlo. Cada vez peores las letras porteñas: las camarillas de Puan son lo último que me puede llegar a interesar.

Anónimo dijo...

¡Muy interesante la reseña!

"...compartimiento de conocimiento que está en la base del pensamiento nerd"

Penelope Cruz dijo...

Sos como el póster a dos tintas del mercado literario: puaj.
Alrt te hubiera pegado una patada en los huevos.

ajsoifer dijo...

No entendí tu metáfora, demasiado elaborada para mí.

Y no conozco a ningún Alrt, pero si me hubiera pegado en los huevos, por las dudas, tengo miedo.

Penelope Cruz dijo...

No te agarrés de un error de tipeo para ningunear.
Yo no te critiqué, piadosamente, que escribas por ejemplo "...es por esto entonces", sin advertir la redundancia.

ajsoifer dijo...

¿Me explicás dos cosas?
1) Lo del póster del mercado editorial.
2) ¿Por qué tanta bronca? ¿Qué te hice?

Anónimo dijo...

el que se mete con el rufian cobra.

es una advertencia para todos los comentaristas anonimos.

los vamos a descubrir a uno por uno y los vamos a colgar de las pelotas. tamo?


asi que calmense un poquito. El rufian está dando sus primeros pasos en el mundo de la literatura, no es un Arlt, no pretende serlo y no creo que este le pegara una patada en las bolas. Salvo que el rufián bardee.

Cosa que no hace.


Alejandro Soifero o muerte.

R
V

Anónimo dijo...

Yo cogi con Pola y el hecho de que sea media-tica me parece cool.

No es una novela como otras.

Parece diario intimo mechado de ficcion.

Ella tiene contradicciones que le molestan, pero esta muy acomodada.

Mediante su amplio conocimiento de filosofia escrita ella encuentra alguna logica que la tranquiliza. Intenta mostrar esa logica en el texto.

Rodrigo Baraglia Di Fulvio dijo...

Bueno, si cogiste con ella entonces debe ser así.

S.F. dijo...

Así que era éste tu post! Lo encontré. Bueno, ya te comenté mi impresión: 6 chispas.
Sí, y la reitero acá para que quede constancia (?) y porque mechupaunhuevo.

La chica Pola está Twisted, su novela es twisted: para mi ésto es lo que mejor la describe en tanto es atrapante, inconexa, divertida, histérica, enferma, perversa, chancha...es como un bricolage! (¿No será una apología al estructuralismo Lévi Straussiano?)

Eso.
Saludo a Ud. y HI5!