13 de abril de 2007

BAFICIando

Exceptuando su primera edición, estuve en todas las instalaciones del BAFICI.
Es decir, hace 8 años que vengo viendo películas en el festival.
Algunas geniales. Algunas simplemente ridículas. Muchísimas olvidables.

Pero hay ciertas características que se repiten en el festival, año a año.

Las colas enormes para sacar entradas, el conformarse con ver películas que uno no quería ver pero que son lo único que se termina consiguiendo, los catálogos inabarcables, los directores que uno no conoce ni conocerá en su vida y la soberbia de miles de estudiantes de cine o aficionados que se sienten con derecho a desplegar sus conocimientos sobre cine Oriental con la sensación de absoluto triunfo sobre nuestra ignorancia premeditada.

He dicho muchas veces que mi única profesión de Fe es la Literatura. El resto de mis pasatiempos son pasiones seculares.
Para la Literatura todo, para el cine un poco de amor burgués y para el resto (la música, el teatro, las artes plásticas) algo de atención. Conformarían una especie de meseta en mis inquietudes, soslayadas por mi pasión ineludible por la Literatura.

Entonces, no me quejo de ver el peor cine comercial y al mismo tiempo disfrutar de algunas películas del BAFICI. No me quejo de no entender de estéticas, ni planos, ni secuencias ni de vidas y obras de directores de apellidos impronunciables.
Simplemente disfruto de ver cine y eso es todo.

No soy como Darío y su propuesta de un cine imposible de tolerar. Yo voy a lo directo, a lo duro, a la sensación, al placer.

Entonces en el BAFICI me guío más que nada por el título de las películas y por el breve resumen que encuentro de ellas y por lo que luego consigo en la boletería.
Y esto me da resultados dispares, obviamente.

En estos años he visto cosas increíbles o que me han gustado muchísimo (en este momento solo recuerdo: Baise-Moi, Spider, Tape, Palindromes, The aristocrats, Me and you and everyone we know, etc. y serán mediocres mis gustos cinéfilos que todas coinciden en tener un puntaje de entre 6 y 7 según IMDB) y tantas otras que he borrado de mi recuerdo (como Trouble Every Day o Bully que me habían ilusionado muchísimo y me parecieron una porquería o infinidad de películas coreanas ignotas que terminé viendo por falta de otra opción).

Y también está el rasgo distintivo del BAFICI de que o te encontrás con gente que en ningún otro momento del año te encontrás o conocés gente extraña.

En la edición del 2003, durante la semana que dan para sacar entradas anticipadas, conocí a una mina bastante rara que se llamaba Nisie, era canadiense nacida en Holanda, vivía en Buenos Aires y era tan porteña como el Tango.
Sacamos entradas para un par de películas, hablamos una vez acerca de las ansias de suicidarnos y de cómo la vida era una mierda y después de eso nos vimos una vez más (según recuerdo) en alguna función de cine y nunca más supe nada de su existencia. Ni tampoco me interesó ni me interesa.


El año pasado me encontré con Alejo, un viejo conocido del CBC con el que habíamos querido armar un festival cultural en Puán.
Habíamos armado una agrupación fantasma con el original nombre de No somos nada en la que militábamos él y yo.
Todo quedó en la nada cuando el rector rechazó nuestra propuesta aduciendo que ya no prestaban el espacio de la puanera para fiestas. A la semana empezaron las fiestas de los partidos políticos de izquierda y nos sentimos levemente estafados.

Alejo me reconoció, yo lo reconocí, pasamos un rato hablando de los viejos tiempos y nos metimos a ver una horrible película brasileña de la cual no recuerdo ni el nombre.
El otro día, lo vi haciendo la misma cola que yo para ir a ver Nightmare Detective pero no llegué a saludarlo.
El mismo día en que conocí a Mariano (como el mismo lo documentó).

Siempre hay algún conocido dando vueltas por ahí porque el festival es el escenario ideal para el despliegue de toda posibilidad de sentirse uno, un poco más snob con fundamento.
Es decir, vas, te ves un par de películas, corrés de una sala a la otra, comés un pancho en la cola de otra película, estás justo en la sala y en la función en la que a un tipo le agarra un ataque al corazón viendo la mencionada Palindromes de Todd Solondz (otra experiencia inolvidable que me regaló el BAFICI) y cuando termina el festival, ya tuviste tu cuota de bohemia como para llenar el cartoncito de fichaje y quedarte tranquilo.

El BAFICI es para los que estudiamos Humanidades lo que la Feria del Libro es a las masas que leen, con suerte, de 1 a 2 libros en un año.
El BAFICI es el espacio para mostrarse. Es la vidriera en la que todos queremos ser vistos, reconocidos por conocidos y por caras conocidas con las que nunca intercambiamos palabra alguna.
Es marca de identidad y es espacio para ganarse la pertenencia a ese pertrecho mundo snob y cool que cualquier puancito que se precie de sí, querrá tener. Al menos en algún sentido. Aunque cueste pasar horas viendo películas horribles. O implique ver películas interesantes (que son las que seguramente se vayan a estrenar comercialmente).

Pero este Festival me parece, ha marcado la emergencia de todo un público nuevo que lo entiende como atracción turística y nada más.

El chiste del gato con pipa que tanto ha dado que hablar tiene un punto: si esto no es para vos, no es para vos.
Una función en la que tres personas que te rodean sacan sus celulares en medio de la proyección y se ponen a mandarse SMS en perjuicio de los espectadores que vemos como una luz incandescente se interpone en nuestro espectáculo, otros que se ponen a bostezar, a quejarse, a mirar el reloj y todo esto en una película con atribuciones comerciales que la hacen de lo más entretenido que se pueda ver en el festival (la mencionada Nightmare Detective) indican claramente que hay una necesidad de legitimación cultural de mucha gente que trasciende a los puancitos y estudiantes de cine de hacer de este Festival una especie de Feria del Libro pero de Cine y que se encuentra en el Festival sin saber bien el motivo.

Y en definitiva lo que nos queda, lo que me queda de cada BAFICI, es lo siguiente:

- La sensación de que las mejores películas te quedaste sin verlas porque las entradas estaban agotadas aún antes que se pusieran a la venta.

- La sensación de que viste un montón de películas de las cuales, con suerte, te gustó la tercera parte.

- El encuentro con un montón de gente que no te vas a volver a encontrar hasta dentro del próximo BAFICI.

- La incógnita de cómo lo hacen mezclada de incredulidad al leer a los críticos que recomiendan antes que se exhiban las películas que "hay que ver".

- La certeza de que la película de la Competencia Oficial que viste y que te encantó va a salir última a la hora de las premiaciones.

- Las tensas entrevistas con directores (luego de la proyección de sus películas) a los que el público le hace preguntas demasiado estúpidas o demasiado eruditas, pero que en definitiva, no interesan en absoluto.

- La paz espiritual de haberte sumergido en esa bohemia snob que tanto te gusta.

- El amargo sabor a derrota al pensar en toda esa gente que no tiene nada que hacer de su vida o le importan un carajo sus obligaciones y pasan todos los días que dura el festival viendo todas las películas que la superposición de horarios les permitan.

Por último, lo que queda es la ilusión del próximo Festival y la añoranza con que, durante el resto del año, pensamos en el que pasó y esperamos el que vendrá.

Nota: La imagen que ilustra este post es un fotograma de la película Baise-Moi, acaso la película que más me enorgullece haber visto en algún BAFICI.

18 comentarios:

la enmascarada dijo...

Y sí, esto es cada vez más así. Yo ya el año pasado renuncié a ir (a la Feria del Libro renuncié hace varios años ya). Por algo existe el blog I hate you Bafici.
Saludos!

Dario dijo...

Este año no fui a nada por falta de ánimos y tiempo. Es el primer BAFICI en unos cuantos años que no voy. Debe ser porque no había a simple vista ninguna película "imposible de tolerar" de esas que me gustan a mi. :P

Pero yo no soy de los que decís que van a ver un par de películas para marcar ficha, cuando lo agarro bien al festival me veo como hace un par de años, unas 30 películas, me paso el dia corriendo de un lugar a otro sin comer y sin dormir y faltando a cualquier otra cosa que tenga que hacer y despues de dos semanas estoy a punto de morir pero por suerte termina.

De la competencia oficial creo que nunca vi una película. Y tampoco vi nunca una nacional en el bafici, me tienen podrido.

Giorgio Novalgina dijo...

me tienen las bolas llenas

Anónimo dijo...

Las prioridades del Rufián están al revés de las mías,yo soy cine cine cine cine cine cine música música música música y literatura
El cine Argentino es de los menos mierda de latinoamerica aunque ustedes se quejen tanto, se los digo como no-argentino. Igual de todas formas los estándares no están muy altos en este momento a no ser que uno crea que las porquerías que hacen en México y Colombia constituyen "buen cine"

Con el viento dijo...

Fui por primera vez al BAFICI este año. Una sóla película pude ver... y es verdad, resultó una película perfectamente olvidable (de no ser se trató de la película más extraña que vi en mi vida). Un film viejo (de los 60´s) con pasajes entretenidos, levemente entretenidos, y otros, densos.

De todas formas creo que lo mejor de la película fue el contexto: las corridas para llegar a tiempo, compartir tiempo con amigos, etc.

A veces siento la incomodidad de ser sincero y decirle a alguien que "aparentemente" sabe más que yo de cine que tal película es inentendible o mala.

Y por cierto, mi entrada se justificó antes de empezar la peli... con el anuncio del cuadro más triste.. jaja.

Mucha suerte, al igual que vos, aún no pude hacer funcionar el www con mi dominio en un blog de blogger.

Nurit dijo...

Me gustó eso de que El BAFICI es para los que estudiamos Humanidades lo que la Feria del Libro es a las masas que leen, con suerte, de 1 a 2 libros en un año.

Yo pensaba en la cantidad de gente que había en la Noche de Las librerías, a la cual yo fui principalmente por Me darás Mil hijos, como creo que varios que rondamos Puan u otros que rondan sociales habrán ido.

Como si las librerías de Corrientes no estuvieran abiertas nunca de noche. Como si un comprador compulsivo de libros como nosotros hubiera elegido esa noche justo para comprar libros.
Creo que también está un poco esa especie de snobismo de encontrarse con gente, como lo que decís del Bafici.

Coincido en que mi verdadera pasión es la literaruta, y el resto secundario, aunque la una se alimenta de las otras. Igualmente, yo pondría al teatro antes que al cine creo.

Andrés Aloy dijo...

Alejandro Haffner, venís escribiendo mucho en este blog, no puedo seguirte el hilo, ahora estoy en un ciber, después leeré.
Otra cosa: me gustaria que amplies tu último posteo a mi última subida en mi blog (sobre el idilio hacia lo foráneo). Realmente me interesa la opinion sobre el tema, posteaste algo, pero o no lo entendí (en parte) o fuiste muy breve.

Saludos, Andrés

ajsoifer dijo...

Enmascarada: Conocía el blog I hate you BAFICI y me parece que es un poquito darle más rienda de la que merece al asunto.
Es como que la crítica también puede ser cool y esnob.
Por eso declaro de antemano que no entiendo ni me interesa entender demasiado de Cine, que lo que digo lo digo como amateur.

Darío: Creí que era claro que no te incluyo entre los esnobs sino que sé, sos uno de los pocos que realmente entienden lo que van a ver y realmente se entretienen con películas coreanas de 8 hs.
Además, cómo no pensar que gracias al BAFICI nos conocimos! Me faltó contar esa anécdota en el post.

Giorgio: Che, pero que humor que tenemos acarito!

Ineptus: Como buen etnocentrista porteño te hacía absolutamente porteño a vos.
Sorpresas que dan los comments.
De todos modos, coincido en que se lo critica en exceso al Cine Argentino. Lo mismo pasa con la Literatura Argentina.
Y ahora que reeditaron Rapado de Rejtman (atención, muy buena inversión en libros de este mes! no me quiero ni imaginar lo que son capaces de decir.

Con el viento: Si te sirvió para tener un buen momento ya vale la pena no?
Lo que decís del miedo a decir que algo no te gustó o no lo comprendiste es una de las cosas con las que más juegan aquellos que ostentan algún tipo de Capital Simbólico.
Los que nos dedicamos a las Letras solemos incurrir en esos esnobismos de cuarta también y me incluyo, lamentablemente.
Daría para largas discusiones el asunto.
Si lográs descubrir el tema del www. avisame ok?

Nucífora: Siempre me pregunto cómo hacer para darle a lo que hacemos nosotros (Literatura) espacios en la agenda cultural. Es muy dificil porque como sabemos la lectura es un placer muy solitario, no comunitario.
Igual, creo que hay una política hecha de falta de imaginación sobre eventos literarios o estímulos a la literatura y la escena literaria posible.
La Feria del Libro, la Noche de las Librerías (que encima cayó JUEVES!!! A QUIÉN SE LE OCURRE?!) son eventos que reúnen de todo un poco no? Creo que están más enfocados a la gente del común y no tanto a nosotros, los que pasamos al menos una vez por semana por Corrientes para ver novedades.

Andrés: Ok, después paso y veo si amplío mi comment.
Saludos.

Salitou dijo...

Hola! Cómo estás? Pasé a saludar nomás, así que te dejo un saludón ;)
Que sigas bien, bah, no, mejor :D
Bye bye!

Don Nadie dijo...

a partir de algunas obsevaciones que haces y algunas que les agregaría empecé a pensar que el cine y el arte estaban muertos o lo que es lo mismo; que eran un divertimento clasista para al clase media, de esto hace 10 años cuando deje de estudiar cine...¿para que? me pregunto ¿para que? si todo muy lindo, pero... ¿para que?

PD; deje de ir al BAfici despeus del 3 año ahi vi muy beunos ciclos (ahora parece haber menos)lo unico que quise ir a ver en este fue la de Hartley peor ya habia pasado, aparte, esta tan caro el costo de vida qu eya no se puede hacer nada,si salís gastas 20$ por dia y con mucha suerte.

ajsoifer dijo...

Yo me metí en Letras por la consciencia de su inutilidad. Estudiar Letras, Artes, Filosofía o Cine es: "Por nada. Porque sí. Porque da placer".

Hoy vimos con ella una muy buena película.
Se llama For your Consideration y nos matamos de la risa. Nosotros y el resto del cine. Además es una película absolutamente digerible. Nada extraño.
Sin embargo, no me extraña ver que en IMDB le dan promedio 6.20 lo que confirma mi entendimiento estético mediocre del cine.

Strawberry Fields dijo...

Me agrego al comentario de Giorgio aun aceptando que yo misma tambien postee sobre el Bafici...creo que con talta voltereta, se termina perdiendo el placer de ir y disfrutar de la pelicula, o peor, uno termina sin poder decir q la peli que vio no le gusto ni un poco, por no tener esos recursos esteticos de los que hablas, uno se calla, una vez mas solo para cultivar la imagen propia de intelectualoide. Vos mismo pusiste el post de Bafici en la categoria de Snobeing.
Lo de compararlo con la Feria del libro me parecio mas que acertado. Tambien renuncie a ir a la Feria del Libro como enmascarada,es mas lo que te ahogas que lo que disfrutas de los libros, y por otro lado, lo de la noche de las librerias...ya sabes lo que pieso despues de haberme pasado 45' esperando un colectivo en el que fuera posible respirar...habria que avisarle a la gente que las librerias abren todos los dias y en corrientes hasta las aprox podes comprar los libros que quieras TODOS LOS DIAS! TODOS LOS DIAS!
Me voy antes de exasperarme.


(Tardo pero llego...viste que comente al final! ;)

Besote

ajsoifer dijo...

Ya sabemos que el grado de aceptación de cualquier cosa en el Universo para SF se mide según la cantidad de minutos que la obligue a esperar el colectivo dividido por la cantidad de gente que colgada de los palos le apachurre el cuerpo.

Como estudiante (vergonzante) de Edición me mandaron unos cuantos mails invitándome a participar de las Jornadas Profesionales en la Feria del Libro al módico precio de $15 (el canon para los no-estudiantes es del triple) y todavía no entiendo cómo es que a alguien se le ocurriría asistir.

Dario dijo...

Jajaja, cierto que nos conocimos hablando del BAFICI.

Tenía muchas ganas de ver For Your Consideration. No podía fallar esa película. Mucha gente grossa ahí.

Anónimo dijo...

"indican claramente que hay una necesidad de legitimación cultural de mucha gente que trasciende a los puancitos y estudiantes de cine de hacer de este Festival una especie de Feria del Libro pero de Cine y que se encuentra en en Festival sin saber bien el motivo" de esto al voto calificado hay cuanto? dos paso? tres?
qué es eso de legitimación cultural? porque no es tu cultura la de otros que van por que sí, lo hacen de manera turística. es menos valido que lo que haces vos de meterte a ver una película cualquier día de la semana?
me dan tanta pena estos comentarios conservadores de los jovenes.

jwc

ajsoifer dijo...

Cuando digo "legitimación cultural" no estoy pretendiendo que se pongan vallas para dejar pasar sólamente a algunos y no a otros.
Me refiero simplemente a esa tendencia mayoritaria entre los asistentes (y entre los que me incluyo) a hacer del espacio del Festival un espacio de vidriera para ganar puntos de Capital Simbólico.
Vas, te encontrás con un montón de gente conocida o comentás con gente conocida que fuiste y entonces te sentís en TU espacio.
Justamente, lo que intento poner de manifiesto es la artificialidad de la pose afectada de los asistentes al festival.
Después que vaya a quien le de la gana. De hecho, creí que quedaba claro que pertenezco a las masas que consumen cualquier tipo de cine, tanto Mainstream como Indie, por lo que si fuera por una cuestión de Curriculum Vitae cinéfilo, deberían dejarme del otro lado de la valla. Pero repito, no dije eso.

Giorgio Novalgina dijo...

en mis tiempos nadie llamaba al festival, "bafici".

la palabra "bafici" me violenta.

¡Me la soba, querido progre cool sin nada para hacer y pocos amigos o novia para ir al cine durante el año en condiciones normales!

(no le hablaba a nadie en particular, aclaro)

ah, vieron la de Bruce Willis?

Anónimo dijo...

Hola!
No puedo creer que te gustó "the aristocrats" a mi me pareció malisima!!
y el bafici... emm me parece molestisimo, este año solo vi una peli vieja en la lugones de un clásico de Brasil, porque no estoy dispuesta a hacer colas de dos horas a menos que sean para que se acabe el hambre en el mundo o alguna cosa así.
Me gusta más el festi de mardel, menos elitista, está lleno de gente grande que va al cine porque le gusta el cine... sin pensar tanto en el qué dirán...
el año pasado una chica había hecho 6 hs de cola en el abasto, un viernes... emm a mi, creo, me daría hasta vergüenza.
Saludos!