2 de abril de 2009

Uno de los días más felices de mi vida

Fue el viernes pasado si no recuerdo mal, cuando mi compañera de trabajo iba directo a tirar al tacho la caja con Audiobooks de Scientología que llegó como donación a la biblioteca.
Que alegría me dio abrir la caja y ver el regalo especial que la Iglesia de la Scientología nos hizo. Le pedí por favor conservarla, y me dijo que le daba igual, si total la iba a tirar. Cuanta maldad hay en este mundo. Cuanta ignorancia.

La caja de la felicidad. Antes de abrirla.


La caja de la felicidad abierta. Mostrando la obra de no-ficción completa de L. Ron Hubbard.

Ahora sí, con tantas horas de felicidad scientológica por delante, puedo decir que mi vida cobra nuevo sentido.
Gracias Bridge Publications por tanto amor.

3 comentarios:

ShopGirl dijo...

wow.

alegria enorme veo.

Beso grande.

Cherno dijo...

¿te hiciste de la secta cienciológica entonces? ¿o ya eras?
¡bien por tu compañera! (¡yo creía que lo de ignorante lo decías por los cienciológicos!)

Juan M dijo...

Que ñoño. Rufián, ya es hora de que te la agarres con la Feria del Libro.